Cambiare el rumbo, en mi mente, en mi soñar. Que a veces se vuelve pesadilla de esta alma que no sabe que pensar, como atormentada de la culpa, como anestesiada de los golpes, algunos que han llegado solo; mas otros causados por errores cometidos, de los cuales no se puede decir que haya arrepentimiento.

Deseo loco de una mente alocada, que más que sentido muchas veces busca olvido; y contradice su destino pensando unas ideas, ejecutando acciones por lo general opuestas. O alma atormentada y tonta, alma humana, queriendo ser diferente, pero tan igual a las otras que ronda por este mundo sin tener idea de lo que quiere.

Siendo todo te das cuenta que eres nada, siendo nada ganas todo. Pasas de un estado a otro tan rápido que no puedes darte cuenta de lo que alcanzas y de lo que al mismo tiempo vas perdiendo.

Alma oculta, alma escondida, con sentimientos que asustaría hasta el héroe más fuerte que muestra lo negro en lo blanco; o alma de cuidado que controlada en este ambiente descontrolado logras detener tu ira para no dañar a los suyos; mas estas lista para atacar aquellos que quisieran intentar lastimarlos.

Y tu porción olvidada, esa que dice ser la alegre y divertida, por qué lloras en este día? Date cuenta que en el cuerpo que habitas todavía respira y tiene vida, date la vuelta y absorbe un poco de energía de ese ambiente extraño de sonrisas escondidas.

La nueva arena ha llegado bajo tus pies, algo mojada por el mar llorado por las nubes eternas de protección lastimada.

Mar enorme, mar hermoso, mar que hoy traes nada, pero mañana no se sabe que puede traer tu marea. Y tu, alma desorientada, prepárate a nadar entre ellas como legenda, como bestia mitológica que rompe fronteras que logra hacer que lo demás escriban historias exageradas, de esas llenas de imaginación que inspira generaciones que asumen lo escrito como verdad y absorben culturas llenas de colorido.

Las distancias eternas entre lo finito que termina en esos puntos y seguido de esas historias que nunca acabaran, que muchas veces serán nuevas para muchos y para otros solo serán repeticiones aleatorias de una vida que va en ciclos, de una energía que nunca muera si no que cambia y evoluciona.

Cambiaré el rumbo de mi mente… veré que el mañana me traerá.